Qué le importa

¿Qué le puede importar mi día?,

O las lágrimas del sol,

Los dorados cabellos,

Y las fibras de terciopelo,

Qué le importa,

Con quién ando,

Esa es cuestión de ética.

Viviendo solitario,

En la individualidad,

Qué le importa,

Mi vestimenta, a la hora de salir.

Qué le importa,

Mi edad, o menú,

La cena y el desayuno,

La caminata,

Y la acampada.

¿Qué le puede importar mi bienestar?

Pues, qué le importa mi vida,

Sencillamente, no somos nada,

Pero, sencillamente, no es para nadie.

Es sólo para mí.

Y me importa todo de mí,

Pero a tí, no te debe importar mi vestir.

Clase del centenario

Somos los Z,
Luego de los Millenials,
Llegando a un siglo,
Dejando atrás la violencia,
Pasando a la tecnología,
Avanzando en radiología,
Construyendo analogías,
De las clases de anatomía,
Leyendo las antologías,
De los juglares de la poesía.
Pero las clases,
Son del centenario,
De la independencia de las naciones,
En los 1800,
Dejando a un lado la evolución,
De la nueva generación.
No tenemos computadores,
Aún siendo los diseñadores,
Profesores mediocres,
Que no evolucionaron,
Y por el contrario,
Se congelaron en el siglo pasado.
Somos la clase del centenario,
Del bicentenario,
Y del siglo evolucionado.